TEJIDO POLIÉSTER

TEJIDO DE POLIÉSTER: ¿CUÁLES SON SUS PROPIEDADES?

El poliéster, gracias a sus ventajas y características, es uno de los tejidos más utilizados en la industria de la moda. Resulta lógico si pensamos que, hoy en día, es posible crear prendas con este material y un tacto muy parecido al que se consigue utilizando fibras naturales.

Además, este tipo de tela es muy adecuado para la confección de ropa laboral, ya que presenta un gran comportamiento en la realización de esfuerzos físicos, favorece la movilidad y es muy confortable. 

TEJIDO POLIÉSTER: ¿QUE ES Y QUÉ PROPIEDADES TIENE?

Este tipo de resina plástica es un derivado del petróleo, que se obtiene a partir de diferentes procesos químicos. Los orígenes del tejido poliéster se remontan a la Segunda Guerra Mundial, cuando se volvió necesario confeccionar uniformes militares ligeros, que facilitaran la movilidad de los soldados. Fue en 1941, cuando los británicos lo inventaron para sustituir al algodón que procedía de Egipto, ante la necesidad de crear uniformes militares más rápidamente para combatir en el frente.

Sin embargo, hoy en día es uno de los componentes más utilizados, sobre todo en la confección de ropa técnica. El poliéster cuenta con una serie de propiedades que le confieren gran relevancia en el sector textil, entre las que podemos destacar:

  • Es muy ligero, pesa muy poco.
  • Aguanta bien la humedad y no se arruga en exceso.
  • Tolera bien el uso de tintes y otros productos químicos.
  • Combina a la perfección con otro tipo de tejidos, como lana, lino o rayón. De esta manera, se pueden confeccionar prendas más resistentes y versátiles.
  • No es un material caro.
  • Facilita la personalización de las prendas, mediante el proceso de sublimación.

VENTAJAS DEL POLIÉSTER EN LA CONFECCIÓN TEXTIL

Sin duda, las propiedades de este material resultan muy atractivas para la confección de ropa. Destacando ventajas como:

  • Elasticidad: Es una cuestión que supone que este tipo de ropa recupere su forma con facilidad, evitando que se deforme. Se adapta al cuerpo y mantiene las arrugas a raya.
  • Resistencia: Puede someterse a procesos de abrasión, decoloración y rayos UVA sin alterarse. También se utiliza para entornos que registran temperaturas elevadas y no suele verse afectado por microorganismos, como las bacterias o el moho.
  • Es un tejido cálido: Impide que el calor salga o que el frío penetre, lo que lo convierte en un material recomendable para la confección de prendas de abrigo.
  • Versatilidad: Se puede mezclar con otros materiales. De hecho, es muy frecuente combinar poliéster y algodón.
  • Ligereza: Permite crear prendas más livianas, sin renunciar a su durabilidad. Un factor destacable en la industria textil.
  • Higiene: Estas prendas se pueden lavar en la lavadora sin que se deterioren, incluso en agua caliente, ya que resisten bien las temperaturas elevadas. Además, se secan muy rápido, así que no hace falta meterlas en la secadora.

TIPOS DE POLIÉSTER

Podemos clasificar las distintas variedades de poliéster de la siguiente forma:

  • PET (tereftalato de polietileno). Este el tipo que se utiliza en el sector textil, aunque también en la fabricación de otros elementos plásticos, como el film transparente o las botellas.
  • PLA (polylactic acid). Es un componente biodegradable, ya que entre sus componentes cuenta con algunos elementos naturales, como el maíz o la remolacha.
  • PTT (poly trimethylene terephthalate). También es biodegradable, ya que cuenta con un 37% de componentes de origen vegetal.

La variedad PET es un derivado del petróleo, el primero que se obtuvo y que, a día de hoy, se utiliza para confeccionar prendas de ropa. Hablamos de un producto que puede reciclarse, otorgándole una segunda vida. De esta forma reducimos la huella de carbono y no sobreexplotamos un recurso finito (petróleo).

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